Revelan la cúpula criminal detrás del secuestro de 29 uniformados en Cauca
Noticias RCN conoció el organigrama en el que se detalla a los ocho responsables de lo ocurrido en el cañón del Micay.
Noticias RCN
01:45 p. m.
La liberación de los 28 policías y un militar retenidos en El Plateado, Cauca, marcó el fin de un episodio, pero el hecho dejó en evidencia el poder y la estrategia de la estructura armada que orquestó el secuestro. ¿Quiénes están detrás de este crimen? ¿Cómo operan?
Revelan la cúpula criminal detrás del secuestro de 29 uniformados en Cauca
Según Inteligencia Militar, el grupo responsable es el Frente Carlos Patiño, una de las estructuras más violentas de las disidencias de las Farc.
Se trata de un grupo que opera principalmente en el suroccidente del país, con fuerte presencia en Cauca y Valle del Cauca. Su actividad delictiva incluye narcotráfico, minería ilegal, extorsión y ataques a la fuerza pública.
El Frente Carlos Patiño es una de las disidencias que se apartó del proceso de paz firmado en 2016 y que sigue en guerra contra el Estado y otros grupos armados por el control territorial.
Se estima que cuenta con 416 integrantes, de los cuales 372 están armados y 44 tienen funciones específicas para generar terror entre la población y ocultar las acciones de la organización.
Estos son los responsables del secuestro
El secuestro en El Plateado no fue un hecho improvisado. De acuerdo con información de inteligencia, fue una operación meticulosamente planeada y ejecutada por ocho clave del Frente Carlos Patiño.
El cabecilla principal es Anderson Andrey Vargas, alias Kevin, quien dio las órdenes para la ejecución del secuestro. Bajo su mando, alias Giovanni o Armero y alias Eduard Ramírez fueron los encargados de enviar audios intimidantes y amenazas a campesinos de la zona para obligarlos a participar en la asonada contra los uniformados.
Otros integrantes de la estructura, identificados como alias Dumar, Farley, Kike, Zamora y Chiqui, habrían coordinado el desplazamiento forzado de campesinos desde municipios cercanos con el objetivo de generar presión y camuflar a los hombres armados entre la comunidad.
Esta estrategia buscaba impedir cualquier reacción del Ejército y generar una imagen de “protesta social” para justificar el secuestro.
¿Cómo se desarrollo el secuestro de los uniformados?
El 7 de marzo, la situación en El Plateado escaló cuando los campesinos, impulsados por las amenazas y órdenes de la disidencia, se tomaron el puesto de la Policía y del Ejército en la zona.
La multitud, en la que se encontraban infiltrados del Frente Carlos Patiño, rodeó a los uniformados, los desarmó y los retuvo contra su voluntad.
Durante varias horas, la tensión aumentó. Videos difundidos en redes sociales mostraban a los policías y al militar en poder de la comunidad, mientras los secuestradores exigían el retiro de la fuerza pública de la zona.
Así fue el proceso de liberación
La salida de los uniformados no fue inmediata. Aunque el Ministerio de Defensa anunció que los retenidos “iban caminando hacia la libertad”, el proceso enfrentó dificultades.
En la noche del 7 de marzo, al menos tres intentos de liberación fueron frustrados debido a la muerte de un civil en la zona, presuntamente a manos de la Segunda Marquetalia, otro grupo disidente de las Farc.