Sancionaron a dos policías por uso excesivo de fuerza contra madre venezolana y sus hijos en Cartagena
Un subteniente y una patrullera de la Policía fueron multados por maltratar a una mujer y dos menores en un centro comercial.
Noticias RCN
04:10 p. m.
La Procuraduría General de la Nación anunció la imposición de sanciones disciplinarias a dos agentes de la Policía Nacional, tras comprobar que utilizaron fuerza desmedida contra una mujer venezolana y sus dos hijos en Cartagena.
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El incidente ocurrió en el centro comercial La Serrezuela, donde la afectada, Wendy Norelys Álvarez Sarmiento, exigía el pago de una liquidación laboral pendiente en una tienda del establecimiento.
Sancionaron a dos policías por uso excesivo de fuerza contra madre y sus hijos en Cartagena
El caso se remonta a un hecho ocurrido en el almacén Jon Sonen, ubicado dentro del centro comercial La Serrezuela, en Cartagena, cuando Wendy Norelys Álvarez Sarmiento, una ciudadana venezolana, se encontraba en el lugar reclamando el pago de su liquidación laboral.
La situación se tornó tensa cuando el subteniente Nelson Enrique Martínez Balceiro y la patrullera Yuliana Jaramillo Mazo ingresaron al local.
De acuerdo con la investigación de la Procuraduría, en lugar de manejar la situación con diálogo o mediar de manera adecuada, los uniformados recurrieron a la fuerza para retirar a la mujer del almacén.
Ella fue esposada y sacada del lugar, junto con sus dos hijos menores, quienes presenciaron todo el procedimiento.
¿Por qué fueron sancionados los de la Policía?
El Ministerio Público concluyó que los agentes involucrados se excedieron en sus funciones, violando los protocolos de actuación y generando un daño moral a la madre y a sus hijos.
El ente disciplinario resaltó que la acción de los uniformados no solo vulneró los derechos de la mujer, sino también los de los menores, quienes quedaron expuestos a una situación de violencia y humillación que podría haber sido evitada.
Asimismo, la Procuraduría determinó que la conducta de los dos policías afectó la imagen de la institución, al evidenciar un comportamiento contrario a los principios de respeto y protección de los derechos humanos que deben guiar a la fuerza pública.
La falta fue calificada como leve, pero bajo el concepto de culpa gravísima, lo que resultó en la imposición de una sanción de 30 días de multa tanto para el subteniente Martínez Balceiro como para la patrullera Jaramillo Mazo.
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