¿Hasta cuándo permanecerá cerrada la Universidad Nacional por la ocupación indígena?
Estudiantes y docentes exigen claridad frente al retorno académico y garantías para continuar el semestre.
Noticias RCN
07:49 a. m.
La Universidad Nacional, sede Bogotá, atraviesa días de incertidumbre debido a la ocupación de varias de sus facultades por parte de la minga indígena, que llegó desde el suroccidente del país.
Aunque inicialmente fueron ubicados en la concha acústica, las condiciones climáticas y el alto número de personas desplazadas llevó a su instalación dentro de aulas de Ingeniería, Medicina, Ciencias Humanas y otros espacios académicos.
Mientras se mantiene la suspensión de las clases presenciales, la comunidad universitaria se pregunta cuándo podrá retomarse con normalidad el semestre.
¿Hasta cuándo permanecerá cerrada la Universidad Nacional por la ocupación indígena?
A medida que transcurren los días, aumenta la preocupación entre los estudiantes y docentes de la Universidad Nacional. La llegada de más de 15.000 indígenas a su campus principal, entre ellos 3.000 menores de edad, ha generado un cambio en la dinámica habitual de la institución.
La ocupación de aulas y edificios obligó a las directivas a trasladar las clases al formato virtual de forma indefinida, sin una fecha exacta para el regreso a la presencialidad.
El rector de la universidad indicó que el retorno dependerá del desalojo progresivo de los espacios ocupados. Según la istración, el cronograma académico se ajustará conforme se vayan liberando las instalaciones.
Sin embargo, para muchos estudiantes la incertidumbre ya comienza a impactar sus procesos de aprendizaje, evaluaciones y planificación del semestre.
¿Qué dicen los docentes?
A pesar de que no se han reportado hechos de violencia, los docentes manifiestan su incomodidad por no poder acceder a sus lugares de trabajo, por las interrupciones a sus actividades y por la convivencia forzada con actores externos al entorno académico.
Algunos de la comunidad universitaria también han expresado inquietud frente a la presencia de bastones de mando y la tensión generada por discusiones verbales en el campus.
Mientras tanto, funcionarios del Distrito, del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar y servicios de salud permanecen en el costado occidental del campus, ofreciendo atención a los integrantes de la minga, especialmente a los menores.