"Perdóname por no gritar justicia": la desgarradora carta de la esposa de Marcelo Pecci por su muerte
Aunque hay seis capturados, ella afirma que los autores intelectuales siguen libres y critica la inacción de la Fiscalía.
Noticias RCN
08:07 p. m.
El 10 de mayo de 2022, el asesinato del fiscal Marcelo Pecci sacudió a Colombia, Paraguay y a buena parte de América Latina. Fue ejecutado a plena luz del día, en una playa privada de Barú, Cartagena.
Dos sicarios le dispararon sin mediar palabra frente a su esposa, la periodista paraguaya Claudia Aguilera, quien estaba embarazada. Aquel crimen, cometido con precisión milimétrica y bajo órdenes que aún no han sido esclarecidas, dejó a un país consternado.
Tres años después, en el aniversario del asesinato, Claudia Aguilera hizo pública una carta abierta dirigida a su esposo, pero también a una sociedad que, según ella, ha dejado avanzar la impunidad.
Esta es la desgarradora carta de la esposa de Marcelo Pecci por su muerte
El mensaje comienza con una frase que resume la intimidad del vínculo y la profundidad del vacío:
- “Hola Marcelo, hola amor”.
Así da inicio una carta escrita “desde el duelo y la rabia contenida”, como ha sido descrita por quienes la han leído. Aguilera recuerda que han pasado ya tres años desde que su esposo fue asesinado en Cartagena y confiesa que aún no tiene la fuerza necesaria para leer en voz alta lo que ha escrito.
Te escribo estas líneas sin tener el coraje para leerlas en voz alta. Te escribo al cumplirse tres años de tu muerte, de tu abrupta partida. Vida, no queríamos que las cosas fueran así.
A lo largo del texto, Claudia expuso cómo ha sido criar sola a “Marcelito”, el hijo de ambos, quien hoy tiene dos años. Aunque cuenta que el niño habla muy bien, también deja ver el peso emocional que ha implicado acompañar su crecimiento en ausencia de su padre.
En un tono profundo, le pide perdón a Marcelo por no usar su rol como periodista para exigir justicia con más fuerza:
Marcelo Pecci, esposo y padre de nuestro amado hijo, quiero pedirte perdón porque la voz se me sigue quebrando al nombrarte. Quiero que me perdones por no utilizar el micrófono que tengo a diario para gritar y exigir justicia. Tengo miedo.
La periodista no solo muestra el impacto emocional del crimen, sino que dirige su señalamiento hacia instituciones que, a su juicio, no han hecho lo suficiente para esclarecer los hechos. Entre ellas, la misma Fiscalía de Paraguay, donde trabajaba su esposo, y que ha exaltado su nombre tras el asesinato, pero sin resultados contundentes.
Te pido perdón Marcelo Pecci por la inacción de tus pares de la fiscalía, que sólo usan tu nombre para reivindicar valores que no los representan. Perdóname por ya no creer en la justicia. Te pido perdón por sentirme impotente ante la crueldad e inmensidad de los hechos.
Esto es lo que más recuerda la esposa de Pecci tras su asesinato
En uno de los fragmentos más crudos de la carta, Aguilera revive el asesinato. Dice que, pese al paso del tiempo, lo que más recuerda no es la sonrisa de Marcelo ni el calor de su abrazo, sino los disparos y la imagen de su cuerpo ensangrentado en la arena.
Perdóname amor por no poder recordarte sonriendo, por no recordar la calidez de tu abrazo y sólo ver y escuchar los tres disparos, por recordar tu cuerpo ensangrentado y tu corazón desvaneciéndose poco a poco.
Hasta el momento, seis personas han sido capturadas por el crimen. Sin embargo, Aguilera asegura que los autores intelectuales aún no han sido identificados ni juzgados, y que eso mantiene viva la sensación de impunidad.
Además, en enero de este año fue asesinado en la cárcel La Picota, en Bogotá, Francisco Luis Correa Galeano, considerado un testigo clave en el caso. Su muerte dejó aún más interrogantes sobre las verdaderas motivaciones y responsables detrás del homicidio.
Finalmente, a modo de súplica, cierra su carta con un pedido directo a su esposo, a quien describe como la base de su hogar y el amor de su vida:
Por último, te pido no te olvides de nosotros. Ayúdanos a seguir fuertes, a no claudicar y a mantener la fe. Tu familia, padres, hermanos, sobrinos, amigos y tantas otras personas que te amamos, vamos a seguir honrando tu memoria buscando justicia en algún lugar del mundo.