Revelan detalles del ataque con francotirador en el que fue asesinado otro policía en Cúcuta
El subintendente Diego Alexander Prieto es el segundo uniformado asesinado en menos de 72 horas en Norte de Santander, al parecer, a manos del ELN.

Noticias RCN
03:46 p. m.
En el área metropolitana de Norte de Santander se mantiene la escalada de violencia contra la fuerza pública. En menos de 72 horas dos uniformados de la Policía Nacional han sido asesinados en distintos ataques terroristas.
El último de los casos se registró la noche del martes 27 de mayo, en zona rural de Cúcuta, donde un subintendente fue asesinado por un francotirador que le disparó en la cabeza y acabó con su vida de manera inmediata.
El comandante de la Policía de Cúcuta, el brigadier general William Quintero, entregó detalles de cómo fue perpetrado el crimen del uniformado a las afueras de la estación.
Detalles del asesinato de policía por francotirador en Cúcuta
El atroz ataque con mira telescópica ocurrió a las 8:30 de la noche, en la estación de Policía del corregimiento de Buena Esperanza, en Cúcuta.
Se presenta un atentado contra la vida del subintendente Diego Alexander Prieto Rodríguez; quien se encontraba de servicio como auxiliar de información cuando fue atacado por un francotirador.
El uniformado se encontraba pasando revista a la parte externa de las instalaciones cuando fue impactado por un proyectil a la altura de la cabeza.
¿Quién está detrás de los asesinatos de policías en Cúcuta?
El subintendente Diego Alexander Prieto Rodríguez, quien llevaba 14 años en la institución, y al menos un año adscrito a la Policía de Cúcuta, cuando fue cruelmente asesinado por un francotirador que le disparó en la cabeza.
Este uniformado es la segunda víctima de la ofensiva del ELN contra la fuerza pública en Norte de Santander en menos de 72 horas.
La noche del sábado 24 de mayo el subintendente Luis Argote Rincón fue asesinado en un ataque contra una patrulla del GOES, en Villa del Rosario, muy cerca de la frontera con Venezuela.
Las autoridades atribuyen, preliminarmente, estos dos crímenes al ELN, quienes habrían desatado una nueva ofensiva contra la fuerza pública.